“Son las 17:44 h del martes. Ahora llega el jefe de la comida. En principio, su hora de entrada al trabajo es a las 16:30 h. Qué felicidad. Lleva semanas arrastrando errores suyos que se la pelan. La mierda para los que estén debajo. No sea que el jefe se amargue con el currele. Qué felicidad. Mientras, en el cuarto oscuro de las ratas, el pringao de la oficina trata de reparar todos los descosidos producidos por los de arriba. No da abasto. Son demasiados. Muchos jefes para tan poco currante. La media no sale.
Son las 20:10 h. de la tarde del martes. Sale de la oficina después de 10 horas de un trabajo en que después de los dos primeros días de la semana ya te ha dejado los nervios destrozados. El estrés. Qué malo es el estrés. Coge el coche y pone un poco la radio mientras conduce a casa. De repente, frenazo. El tarado de turno con la música a toda pastilla y el cochecito de escalextric se ha saltado el stop. FELICIDAD. Ojito con enfadarte, no vaya a ser que el nennng se mosquee. Arranca de nuevo y ponte en marcha. Los pies destrozados por el cansancio están a punto de reventarte el zapato.
A las 20:20 h. llega a casa. Una cervecita nunca viene mal. Relaja el espíritu. El primer momento de FELICIDAD. Felicidad relativa, la cerveza se acaba. Telediario. Atentado en Irak. Atentado en Filipinas. Terremoto en India, pero gana la Selección. FELICIDAD. Qué bonito es el fútbol. Levanta pasiones.
Sale a las 21:15 h. a tomar otra cervecita con los amigos. FELICIDAD. Son las únicas personas que comprenden. Entra en un bar. 6 euros por una mediana y unas bravas. Que buenas están las bravas con su cervecita, da igual lo que te cobren. Otra ronda, por favor.
Llega de nuevo a casa a las 23:15 h. completamente borracho. Claro, bronca con la parienta. Ella no entiende su actitud. Piensa que la vida debería ser hermosa para él estando los dos juntos. Él debería ser FELIZ. Algo falla, alguna cosa no cuadra. Es imposible no ser feliz al lado de una chica como ella.
Son las 3:23 h. y él no puede dormir. Demasiados problemas. Con su trabajo, con su chica, con él mismo, con toda su vida. Se levanta al lavabo. Meada rápida. Mirada al espejo. Asco con lo que ve. Abre el armario del lavabo, coge el bote de pastillas. Tomará una, dos, tres, las suficientes para dormir. Mejor diez, así no falla. Ve luces, los conejitos danzan, el amarillo, el verde, el morado... le llaman.... FELICIDAD.
A las 8:00 h. del miércoles suena el despertador. Su chica se despierta. Nota el frío. Le zarandea, le mueve, le llama, mientras por su mejilla se escurren las primeras lágrimas, sabiendo que la rata del cuarto oscuro ha muerto...”
La Gloriosa Cancillería se vanagloria en hacer público este interesante texto de nuestro amigo PACO (Las Palmas): Nuestro amigo Paco nos escribe y nos comenta en su carta que la vida está hecha a base de sufrimiento y dolor, y que la forma normal de una persona es en un estado psicótico de depresión y desprecio por sí mismo, por la vida que le ha tocado vivir, por las cosas que no podrá tener nunca, y nos envía este texto para que en la Cancillería le aconsejemos el camino a seguir y la forma de ver la vida desde una perspectiva un poco más “saludable”:
- Amigo Paco, se te va la olla completamente. Hemos leído y releído el texto en la Cancillería, canciller por canciller, y no entendemos el mensaje que quieres enviar. Sinceramente, no lo entendemos. Di que somos tontos. El tonto eres tú. Pensar que alguien con sus dos pares de conjoncitos bien puestos quiere hacer algo así es para ir a mear y no echar ni gota. La vida está para cogerla tal como viene, con una sonrisa, y si no puede ser sonriendo, apretando los dientes y dejando que te penetre hasta el fondo, pero sin lloros, que no somos mariconas. Nadie dice que la vida sea fácil, pero ahí está para vivirla. Hay que aprender a hacerlo, poco a poco, o a hostiazo limpio, pero las cobardías se quedaron atrás. Así que déjate de pamplinas y espabila, coño, que se te va a pasar el arroz!!”
FELICIDAD = COJONES PARA VIVIR LA VIDA EN TODAS SUS FORMAS
FELICIDAD: BONITA PALABRO
21 de junio de 2006
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1 comentario:
Como diría Clint Eastwood: "Morir no es forma de vivir".
Estoy de acuerdo con la igualdad apuntada.
Mas es tentador morir un rato, imaginar que la mierda se acaba con todos los que hay dentro.
Pero sólo un rato, un segundo de descanso. Lo que dura un valium con whisky.
La vida y yo somos dos vecinos mal avenidos, ella me cobra un alquiler abusivo y yo tiro mis colillas a su patio, ensuciándoselo.
Buen sexo.
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